El Bearded Collie es un perro de tamaño mediano, cariñoso, familiar y juguetón con carita de bueno. Parece que nunca han roto un plato pero el hecho de ser un perro de pastoreo hace que sean activos y si los dejamos mucho tiempo solos encontrarán fácilmente diversiones alternativas. Por eso es importante que hagan ejercicio, no sólo para desarrollarse adecuadamente sino como forma de derrochar su energía de manera que el tiempo que pasan en casa con nosotros sea del agrado de todos. Es un animal muy casero al que le encanta estar rodeado de gente. Se convertirá en tu sombra allá donde vayas y es una estupenda compañía para los niños.

Generalmente son perros amistosos con los demás animales y con las personas aunque, dado que tienen un oído muy desarrollado, hay algunos que se muestran más temerosos con los ruidos. Una característica muy suya es su tendencia a saludar dando saltos y sobre las patas traseras lo cual hay que intentar atajar desde que son cachorros. Son inteligentes y tienen una gran capacidad de aprendizaje lo cual es una ventaja durante su proceso de educación. La etapa de adiestramiento es importante en cuanto que marcará su comportamiento en el futuro y como se suele decir “un perro educado es un perro feliz”. 

La alimentación debe ser de calidad y equilibrada por lo que los piensos para mascotas son la opción ideal ya que hoy en día hay algunos piensos con alto valor nutritivo muy saludables. Lo más habitual es alimentarles una vez al día aunque también se puede repartir la comida en dos tomas. Deben tener siempre disponible agua fresca y limpia.

La higiene y el cuidado del pelo es un factor muy importante tanto en esta raza como en otras razas de pelo largo. Su pelaje le protege del frio y a su vez le aísla del calor. Debemos poner especial interés en el cuidado del pelo tanto si lo hacemos nosotros mismos como si nos ponemos en manos de profesionales. Nuestra experiencia nos dice que es conveniente bañarlos al menos una vez al mes o más frecuentemente si fuera necesario. Para ello, nosotros utilizamos un champú neutro para la zona de pelo blanco y otro para la de color así como finalmente un acondicionador. Para protegerles los oídos debemos introducir dos algodones antes del baño y posteriormente asegurarnos de que las orejas queden bien secas. El pelo debe estar bien mojado antes de aplicar el champú y debemos masajear hasta obtener abundante espuma. El aclarado es fundamental y especialmente el posterior cepillado debido a su doble capa de pelo. Es habitual también cepillarlos antes del baño para que los posibles nudos no se apelmacen.

Debemos cepillarlos al menos una vez por semana de manera que el cuidado sea continuo y no se le formen muchos nudos. Es importante que el pelo esté un poco húmedo para evitar que se rompa fácilmente. Hay diversas técnicas de cepillado aunque creemos que es muy útil acostumbrarles desde pequeños a tumbarse para facilitar el acceso a las zonas de las patas interiores y el vientre. Una vez al mes debemos cepillar con cuidado mechón a mechón asegurando que no queda un solo nudo y que llegamos hasta la capa del subpelo. La zona de las patas les resulta un poco más molesta por lo que habituarlos al cepillado desde cachorros resulta una gran ayuda.

Debemos proveernos de los materiales necesarios y de una mesa de peinar si queremos ocuparnos personalmente de su aseo ya que es una tarea que puede llevarnos un tiempo considerable y debemos asegurarnos de que disponemos de los utensilios adecuados.

Por lo que respecta a su salud, es una raza en general con pocos problemas de salud y su media de vida ronda los 14 años. Las visitas al veterinario serán por lo general las normales para sus vacunaciones y seguimiento. No se caracteriza por ser un ladrador en exceso lo cual es una ventaja por lo que respecta a nuestros vecinos.

Lo normal es que el criador de Bearded Collie siempre esté dispuesto a hacer seguimiento de los cachorros y a ofrecer su ayuda y experiencia a cualquier persona interesada en conocer la raza.